Actualmente tenemos muchos problemas en los discos duros de nuestros portátiles o externos debido a la fragilidad de estos por su funcionamiento mecánico, pero esto ya se ha visto resuelto por la nueva tecnología de disco SSD.
¿Como funcionan?
Estos poseen dos zonas de memoria, una en la que se guarda toda la información aunque deje de tener corriente eléctrica y otra, de mucho menor tamaño, que actúa de cache acelerando los accesos. Todo este sistema es gobernado por un controlador que actúa coordinando los distintos elementos.
Para mejorar la velocidad y la resistencia a fallos nos encontramos con varios bloques de memoria que actúan como un RAID en miniatura.
¿Qué obtengo al adquirir un disco duro SSD?
Las ventajas respecto a un disco duro tradicional son varias:
- Rapidez. Tanto en la búsqueda de los datos como en las lecturas posteriores. En una unidad de este tipo el tiempo que tienes que esperar hasta obtener el flujo de datos es siempre el mismo. No es necesario desfragmentar.
- Mayor resistencia. Al no tener componentes móviles responden mejor tanto a las vibraciones como a los golpes.
- Menor consumo. Necesitan menos potencia para funcionar. Esto los hace ideales para dispositivos portátiles, además significa que se desgastan menos debido al calor y por lo tanto su vida útil aumenta.
- Menor ruido. Otra ventaja más de no tener partes móviles.
Es posible usar configuraciones hibridas con un disco duro SSD que actúa de memoria cache de un disco duro convencional. Esto se denomina SSD caching y por ejemplo lo puedes encontrar en las placas base con chipset Z68 de Intel.
Existen otro tipo implementaciones en las cuales el sistema operativo decide si los archivos se encuentran en el disco duro convencional o en el SSD. De esta forma no se pierde tamaño de disco como si ocurre en las configuraciones hibridas.
¿Tienen algún inconveniente estos discos duros?
La tecnología de discos duros tradicionales lleva usándose durante décadas, lo cual ha permitido crear dispositivos muy económicos. Los discos SSD aparecen como la solución a muchos problemas pero tienen el inconveniente de que son muy caros.
Su único problema aparte de su precio es que los discos duros SSD debido a su modo de funcionamiento tienden a ser más rápidos cuando se empiezan a usar y van perdiendo velocidad con el tiempo. Esto que era un grave problema en las primeras generaciones parece que ya no lo es tanto.
¿Son todos los discos duros SSD iguales?
No, y además dada su variedad se pueden clasificar de varias formas.
Atendiendo a su conexión a tu PC:
- PCIe SSD. En un disco PCIe SSD la unidad se conecta a un puerto PCI Express como si fuera una tarjeta interna adicional. De esta forma pueden funcionar mucho más rápido y no estar limitado por el estándar SATA.
- Sata SSD. Utiliza el mismo conector que un disco duro normal. Es tu única opción si quieres agregar un SSD a un portátil o laptop.
La información en cualquier sistema informático se almacena como una ristra de unos y ceros. Cada uno de estos elementos es lo que se llama un bit de memoria.
En los primeros SSD cada uno ocupaba una celda y con cada nueva generación se intenta añadir más por celda reduciendo así el precio necesario para conseguir tener la misma capacidad.
Esto tiene algunos efectos secundarios, estas memorias tienen un ciclo de vida más corto debido a que los niveles de tensión eléctricos en cada celda están más cercanos. Atendiendo a esta clasificación tenemos los siguientes modelos:
- SLC. Acrónimo de Single Level Cell. Es la primera que se empleo. Tenemos un bit por celda. En la actualidad las podemos ver en entornos de servidor debido a su alto precio.
- MLC. Acrónimo de Multi Level Cell. Tenemos dos bits por celda. Pueden almacenar cuatro estados.
- TLC. Acrónimo de Triple Level Cell. Tenemos tres bits por celda. Pueden almacenar ocho estados.